Volemos un poco...

Veo un espacio donde cabe todo lo que somos, un proyecto, libros y palabras, cine mudo, música cómplice... silencios, cadenas de esfuerzo, visiones de esperanza, besos, abrazos, sexo, contacto, contacto y más contacto. El mate, el café, el vino, las pizzas, las milanesas napolitanas. Y por ahí, saltando, un joven que pinta montañas y entiende que su mundo avanza y que siempre tendrá un lugar, un dónde regresar para tomar impulso, traiga lo que traiga y sea como sea...También veo un espacio para los errores y las sombras y muchas páginas en blanco para improvisar.

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